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24. AMIGO COMPASIVO

Encuentra una posición cómoda, ya sea sentado o acostado. 

Cierra suavemente los ojos. 

Toma unas respiraciones profundas para instalarte en tu cuerpo. 

Pon una o dos manos sobre tu corazón u otro lugar que te dé calma para recordarte a ti mismo de prestarte atención amable o amorosa. 

Lugar seguro 

Imagínate en un lugar seguro y cómodo, que podría ser una habitación acogedora con una chimenea ardiendo o una playa tranquila con un sol cálido y una brisa fresca, o un claro de algún bosque. También podría ser un lugar imaginario, como flotar en las nubes… dondequiera que te sientas tranquilo y seguro. Quédate allí y disfruta de la sensación de comodidad en este lugar. 

Amigo compasivo

Pronto recibirás un visitante, una presencia cálida y compasiva, un amigo compasivo, una figura ideal que encarna las cualidades de sabiduría, fortaleza y amor incondicional. 

Este ser puede ser una figura espiritual; un maestro sabio y compasivo; alguien de tu pasado que encarne plenamente las cualidades del amor y la sabiduría (tal vez un abuelo amoroso); o este ser podría surgir por primera vez, ahora mismo, en tu imaginación. 

Además, es posible que tu amigo compasivo no tenga ninguna forma en particular, pero sea más como una presencia cálida o una luz radiante. 

Tu amigo compasivo se preocupa profundamente por ti y le gustaría que fueras feliz y que vivas con facilidad. 

Permite que tal ser surja en tu mente, imaginando este ser —esta presencia— con tanto detalle como desees. 

Llegada 

Tienes la opción de salir de tu lugar seguro y conocer a tu amigo compasivo.

Aprovecha esta oportunidad ahora, si lo deseas. 

Ubícate frente a tu amigo compasivo a una distancia que te acomode, tal vez cerca o tal vez a una distancia respetuosa. 

Entonces permítete estar en compañía de este ser. No hay nada que tengas que hacer, excepto experimentar el momento. 

Permítete recibir plenamente el amor incondicional y la compasión que este ser tiene para ti. 

Si no puedes dejarlo entrar, también está bien… este ser te acompaña de todos modos.

* Práctica recopilada por Cristopher Germer y Kristin Neff para el Center for Mindful-Compassion.

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